Las empresas incorporan también a mujeres y extranjeros, por lo que favorece la diversidad.
El retrato tipo del consejo de administración de una empresa española está cambiando. La estampa de veteranos consejeros, casi todos hombres, españoles y de sesenta o setenta y pico años está siendo reemplazada por otra en la que abundan extranjeros, jóvenes (con una media de 53 años) y con formación tecnológica. Y cada vez más mujeres. Son algunas de las conclusiones de un reciente estudio de la consultora Korn Ferry sobre los consejeros no ejecutivos (independientes y dominicales) que se incorporaron a las empresas cotizadas españolas (tanto del Ibex como del mercado continuo) en 2016.
Ese año se produjeron 123 nombramientos, de los cuales 82 fueron independientes (es decir, aquellos que no representan ni a los accionistas ni al equipo directivo de la compañía) y 41, dominicales, los que actúan en nombre de aquellas empresas que tengan al menos el 5% de las acciones. Según Korn Ferry, el hecho de que el 67% de los nombramientos correspondan a independientes indica que «los impulsos regulatorios están actuando como catalizadores del crecimiento de la independencia y la diversidad en los consejos». Por ejemplo, el punto 17 del Código Unificado de Buen Gobierno de las Sociedades Cotizadas (aprobado por la CNMV en 2015) insta a las empresas a que al menos el 50% de su consejo esté formado por independientes.
«El estudio indica claramente que se está refrescando el pool de talento que hay actualmente en los consejos españoles», asegura Loreto González, senior partner de Korn Ferry. En su opinión, una de las muestras de esa renovación es que, aunque todavía se trata de un porcentaje pequeño, un 14% de los nuevos consejeros tiene un perfil tecnológico-digital, de los cuales un 65% son mujeres. «Por lo general el planteamiento de las empresas a la hora de fichar a independientes es que tengan una gran experiencia en su sector y, si esto se cumple, mejor si son mujeres», señala González. El mencionado Código de Buen Gobierno apunta a la meta de que, en 2020, las mujeres supongan el 30% de los consejos de administración de España. «Todo parece indicar que el binomio mujer y tecnología incrementa en gran medida la probabilidad de obtener una silla en un consejo», destaca el informe.
No obstante, la mayor cantera de consejeros es la banca, de donde provino el 39% de los nombramientos. De hecho, de los 36 consejeros que en 2016 se incorporaron a empresas del Ibex 35, catorce procedían del sector financiero. El estudio no se sorprende de este fenómeno, ya que «se trata de una industria que atraviesa una etapa de reconversión y de grandes retos regulatorios, financieros y tecnológicos».
Extranjeros
Casi la mitad (el 44%) de los consejeros designados en 2016 eran extranjeros. En concreto, el 33% procedía de Estados Unidos; el 20%, de países de Oriente Próximo, Europa y África; el 7%, de Reino Unido; y el 5%, de América Latina. Según González, esto se debe principalmente a dos motivos: la creciente entrada de empresas internacionales en el accionariado de compañías españolas y la presencia global de éstas, que empuja a una mayor presencia de consejeros de otros países que conozcan las características específicas de un determinado mercado.
El 50% de los nuevos consejeros encuestados por Korn Ferry aseguró que la principal característica por la que fueron fichados es la de tener un «bagaje generalista», es decir, haber desempeñado cargos de responsabilidad en diversas áreas. A continuación, los consejeros destacaron como virtudes determinantes la experiencia internacional, una experiencia heterogénea, habilidades financieras, capacidades tecnológicas, experiencia previa como consejero y fomento de la igualdad de género.
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